¿QUÉ ES LA LEGIONELLA?
La legionella produce legionelosis, que puede presentar dos formas de enfermedad:
Neumonía o “enfermedad del legionario”, de carácter grave e incluso mortal. Tiene un período de incubación de 2 a 10 días.
“Fiebre de Pontiac”, de carácter leve y con síntomas parecidos a una gripe.
Realizamos tratamientos de prevención y control de la legionella en las siguientes instalaciones:
• Torres de refrigeración y condensadores evaporativos.
• Sistemas de agua caliente sanitaria con acumulador y circuito de retorno.
• Sistemas de agua climatizada con agitación constante y recirculación (spas, jacuzzis, otras).
• Sistemas de instalación interior de agua fría de consumo humano (tuberías, depósitos, aljibes), cisternas o depósitos móviles y agua caliente sanitaria sin circuito de retorno.
• Equipos de enfriamiento evaporativo.
• Humectadores
• Fuentes ornamentales
• Sistemas de riego.
• Sistemas de agua contra incendios
• Otros que acumulen agua y puedan producir aerosoles.
Somos especialistas en la prevención y control de legionella y legionelosis en Leganés.
¿CÓMO PUEDE CONTRAER LEGIONELOSIS?
La legionelosis se contrae a través de las vías respiratorias por la inhalación de aerosoles o la aspiración de agua que contenga la bacteria legionella en cantidades elevadas.
Los aerosoles se forman a partir de pequeñas gotas que pueden generarse al pulverizar el agua o insuflar burbujas de aire a través de ella. Cuanto más pequeñas sean las gotas, más peligrosas son. Las gotas cuyo diámetro es inferior a 5 µ llegan con más facilidad a las vías respiratorias inferiores.
El riesgo de contraer la enfermedad dependerá de la concentración, tipo y virulencia de las bacterias en el aerosol y del tiempo de exposición.
No se ha declarado transmisión de persona a persona y tampoco por ingestión.
Las instalaciones que pueden ser fuente de contaminación son aquellas que, tras ser colonizadas por legionella, favorecen la proliferación de la bacteria y producen aerosoles.
Las siguientes son focos potenciales de legionelosis:
• Sistemas de agua caliente y fría
• Torres de refrigeración y condensadores evaporativos
• Bañeras de hidromasaje y fuentes de aguas termales
• Fuentes y aspersores
• Humidificadores ambientales
• Túneles de lavado de vehículos
Y en general toda instalación que utilice agua y produzca aerosoles
Para prevenir la legionelosis hay que actuar sobre las 3 etapas que se relacionan a continuación:
La vía de entrada, controlando la calidad del agua de entrada a la instalación. Ha de ser un agua de calidad controlada, con una concentración de cloro residual que garantice su calidad microbiológica.
Evitar su multiplicación en el interior de la misma, impidiendo y controlando las condiciones que favorecen su multiplicación, tales como temperatura y presencia de nutrientes (limpieza y desinfección).
Evitar o disminuir su aerosolización, controlando la generación y el vertido de aerosoles (ubicación de torres de refrigeración, incremento del tamaño de gota de aerosoles…)